Henri de Toulouse-Lautrec
Biografia
URL Video: https://youtu.be/ZKchZtz99s0
Henri Marie Raymond de Toulouse-Lautrec-Monfa (Albi, 24 de
noviembre de 1864 - Château Malromé, Saint-André-du-Bois, 9 de septiembre de
1901), conocido simplemente como Toulouse-Lautrec, fue un pintor y cartelista
francés, que destacó por la representación de la vida nocturna parisina de
finales del siglo XIX.
Se le enmarca en el movimiento postimpresionista, pero hay
debates sobre si la intención subversiva de su obra contra el statu quo de las
relaciones extramatrimoniales debe hacer su obra única, creando su
categorización propia e inconmensurable.2
Infancia
Nació en el castillo de Albi en el seno de una familia de la
nobleza. En su familia, como era habitual en muchas dinastías de la antigua
aristocracia, muchos matrimonios se concertaban entre parientes para evitar las
divisiones territoriales y la dispersión de la fortuna. Este fue el caso de los
padres de Henri, el conde Alphonse de Toulouse-Lautrec-Montfa (1838-1913) y
Adèle Tapié de Celeyran (1841-1930), que eran primos en primer grado. La
endogamia hubo de condicionar la salud del artista. Henri fue el primogénito y
cuando tenía cuatro años nació su hermano Richard-Constantine, que falleció un
año después. Por desavenencias, sus padres se separaron en 1868 y él quedó bajo
el cuidado de su madre.
Su infancia fue feliz a pesar de que padeció una enfermedad
que afectaba al desarrollo de los huesos y que comenzó a manifestarse en él en
1874. Su constitución ósea era débil y entre mayo de 1878 y agosto de 1879
sufrió dos fracturas en los fémures de ambas piernas, que le impidieron crecer
más, alcanzando una altura de 1,52 m., a pesar de que su madre, preocupada por
su salud y crecimiento, consultó a numerosos médicos y le llevó a tomar baños
termales.
Desde niño gustaba del dibujo, trazando en sus cuadernos
escolares bocetos de caballos, su padre era un gran aficionado a la caza y la
equitación, los paisajes en torno al castillo y de sus familiares. Dándose
cuenta de su talento, un amigo de su padre, el pintor René Princeteau, le dio
algunas clases particulares.
Carrera en París
Toulouse-Lautrec decidió ser pintor, y con el apoyo de su
tío Charles y varios pintores amigos de la familia, como Princeteau, John Lewis
Brown y Jean-Louis Forain, fue a vivir a París en 1881. Allí, fue alumno de
Léon Bonnat, que era un retratista de moda, y, cuando se cerró el taller de
Bonnat en septiembre de 1882, tuvo que buscar un nuevo maestro, Fernand Cormon.
En el estudio de Cormon se hizo amigo de Vincent van Gogh.2
En 1884 Toulouse-Lautrec fue a vivir al barrio de
Montmartre, donde tuvo vecinos como Degas. La fascinación que sentía por los
locales de diversión nocturnos le llevó a frecuentarlos con asiduidad y hacerse
cliente habitual de algunos de ellos como el Salón de la Rue des Moulins, el
Moulin de la Galette, el Moulin Rouge, Le Chat Noir o el Folies Bergère.2 Todo
lo relacionado con este mundo, incluida la prostitución, constituyó uno de los
temas principales en su obra. En sus obras de los bajos fondos de París pintaba
a los actores, bailarines, burgueses y prostitutas. A estas las pintaba en su
vida cotidiana: mientras se cambiaban, cuando acababan cada servicio o cuando
esperaban una inspección médica.
Al contrario que los artistas impresionistas, apenas se
interesó por el género del paisaje, y prefirió ambientes cerrados, iluminados con
luz artificial, que le permitían jugar con los colores y encuadres de forma
subjetiva. Muy observador, le atraían la gestualidad de los cantantes y
comediantes, y le gustaba ridiculizar la hipocresía de los poderosos, que
rechazaban en voz alta los mismos vicios y ambientes que degustaban en privado.
Los dueños de los cabarets le pedían que dibujara carteles
para promocionar sus espectáculos, algo que entusiasmó mucho a Lautrec, ya que
en sus largas noches en estos locales dibujaba todo lo que veía y lo dejaba por
las mesas. Al contrario que el incomprendido Vincent van Gogh, Toulouse-Lautrec
llegó a vender obras y fue reconocido, si bien su popularidad radicó en sus
ilustraciones para revistas y carteles publicitarios más que en la pintura al
óleo.
Tuvo grandes amigas como la bailarina Jane Avril, a la cual
dedicó varios cuadros y carteles. Conoció a bailarines reconocidos como
Valentín el Descoyuntado, payasos y demás personajes de las fiestas y
espectáculos por los suburbios. Este mundillo de vicio y extravagancia fue un
refugio para Lautrec, quien se sentía rechazado por la nobleza a la que
pertenecía por origen. Su minusvalía causaba rechazo en los salones chic, y en
Montmartre pudo pasar desapercibido y dar rienda suelta a su bohemia. Criticaba
a todos aquellos que reflejaban paisajes en sus cuadros, ya que él opinaba que
lo que verdaderamente valía la pena eran las personas, el pueblo. Se
consideraba a sí mismo un cronista social y se mezcló, pintó y fue como el
pueblo. Pintó grandes obras como La inspección médica.
Toulouse-Lautrec en su atelier, con una modelo (1895).
Fotografía de Maurice Guibert (1856-1913).
En 1886 abandonó el estudio de Cormon y arrendó el suyo
propio. En los años 1890 viajó hasta Londres donde conoció y retrató a Oscar
Wilde; también diseñó el programa de mano (folleto o cuadernillo) repartido en
el estreno parisino de su drama Salomé.
Tenía problemas con el alcohol y además contrajo sífilis, lo
que muchas veces derivaba en accesos de locura. El alcoholismo deterioró su
salud, y a partir de 1897 padeció manías, depresiones y neurosis, además de
ataques de parálisis en las piernas y en un costado. En 1897 tuvo que ser
recogido de las calles a causa de una borrachera, y poco después en un delírium
trémens llegó a disparar a las paredes de su casa creyendo que estaban llenas
de arañas. Sin embargo, seguía pintando de forma firme y rápida; pero lo
volvieron a recoger alcoholizado en 1899 y lo internaron en un sanatorio
mental, donde realizó una colección de pinturas sobre el circo. Le dejaron ir a
casa de su madre en las posesiones de ésta cerca de Burdeos, y el 9 de
septiembre de 1901 murió postrado en su cama.
En 1922 su madre y su marchante abrieron el Museo
Toulouse-Lautrec en el Palacio de la Berbie, Albi, muy visitado y reconocido
por su amplia colección.
Obra
Palacio de la Berbie, actual Museo Toulouse-Lautrec.
La obra de Toulouse-Lautrec se caracteriza por su estilo
fotográfico, al que corresponden la espontaneidad y la capacidad de captar el
movimiento en sus escenas y sus personajes, siendo el suyo un estilo muy
característico. A esto hay que añadir la originalidad de sus encuadres,
influencia del arte japonés, que se manifiesta en las líneas compositivas
diagonales y el corte repentino de las figuras por los bordes. Poseía una
memoria fotográfica y pintaba de forma muy rápida. Sin embargo, su primera
influencia fue la pintura impresionista y, sobre todo, la figura de Degas, de
quien siguió la temática urbana alejándose de los paisajes que interpretaban
Monet o Renoir. Fue la vanguardia del modernismo y del art nouveau.
Lautrec fue fundamentalmente un dibujante e ilustrador,
tareas que le permitieron subsistir. Sus pinturas al óleo son comparativamente
escasas y apenas las expuso en vida. Al contrario que Van Gogh, su «malditismo»
o fama de persona marginal no implicaron que fuese un artista fracasado; y de
hecho fue muy popular por sus ilustraciones y carteles publicitarios. Aportó
quince diseños al semanario Le Rire y también ilustró el programa de mano del
estreno teatral de Salomé de Oscar Wilde.
Divan Japonais
Tumba de Toulouse Lautrec (Verdelais)
Entre sus obras podemos citar las siguientes:
Autorretrato ante el espejo (óleo sobre cartón, 1880).
Lacayo de caballerías con dos caballos (óleo sobre cartón,
1880).
El Conde Alphonse de Toulouse-Lautrec conduce su coche de
cuatro caballos (óleo sobre tela, 1881).
La madre del artista, Condesa Adèle de Toulouse-Lautrec,
desayunando en el Castillo Malromé (óleo sobre tela, 1881-1883).
El joven Routy en Céleyran (óleo sobre tela, 1882).
La gorda Marie Martín (óleo sobre tela, 1884).
La lavandera (óleo sobre tela, 1884).
Retrato de Vincent van Gogh (pastel sobre cartón, 1887).
Amazona en el circo Fernando (óleo sobre tela, 1888).
Mademoiselle Marie Dihau al piano (óleo sobre cartón, 1890).
En el Moulin de la Galette (óleo sobre tela, 1889).
Baile en el Moulin Rouge (óleo sobre tela, 1890).
Moulin Rouge: la Goulue (litografía en colores, 1891).
Reine de joie (litografía en colores, 1892).
Ambassadeurs: Aristide Bruant (litografía en colores, 1892).
El inglés en el Moulin Rouge (óleo y gouache sobre cartón,
1892).
En el Moulin Rouge: dos mujeres bailando (óleo sobre cartón,
1892), Museo Nacional de Praga, Praga
Divan de Carmenchu (litografía en colores, 1892-1893).
Yvette Guilbert (gouache sobre cartón, 1894; Museo
Thyssen-Bornemisza, Madrid).
Jardín de París: Jane Avril (litografía en colores, 1893).
La inspección médica (óleo sobre cartón, 1894).
Confetti (litografía en colores, 1894).
Salón de la Rue des Moulins (óleo sobre lienzo, h. 1894),
Museo Toulouse-Lautrec, Albi
La payasa Cha-U-Kao (óleo sobre cartón, 1895), Museo de
Orsay, París
La pasajera de la cabina (litografía en colores, 1896).
La bañera (litografía en colores, 1896).
La toilette (óleo sobre cartón, 1896), Museo de Orsay, París
Paseo por el campo (litografía en colores, 1897).
La pelirroja con blusa blanca (óleo sobre lienzo; Museo
Thyssen-Bornemisza, Madrid).
Referencias
Texto tomado de: https://es.wikipedia.org/wiki/Henri_de_Toulouse-Lautrec
1 imagen tomada de: https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/a/aa/Photolautrec.jpg/210px-Photolautrec.jpg
2 imagen tomada de: https://www.biografiasyvidas.com/biografia/t/fotos/toulouse_lautrec.jpg
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